Esas son las siglas que componen el acróstico DEI en inglés.
Yo no había oido nunca hablar de ello pero hace algún tiempo leí un articulo muy interesante (ya no recuerdo dónde ni quien era su autor) que hablaba de la relación que había entre los accidentes aéreos y el DEI, es decir la incompetencia de aquellas personas que tienen como misión vigilar las condiciones de vuelo de ciertas aerolineas y de la recurrencia de estas averías en ciertos modelos. Vuelvo a decir, que hace algunos meses que leí este articulo y no recientemente y a raíz de los accidentes que han tenido lugar en Filadelfia y en Washington.
Lo que ha aumentado paradójicamente en los últimos días son los artículos que hablan a favor del DEI, basta con entrar en substack y buscar con esa palabra (DEI). Yo lo he hecho y me he encontrado multitud de artículos que defienden esa estrategia a fin de dar oportunidades a los que en teoría no las tenían, algo así como dar visibilidad a la gente por su raza, orientación sexual, o cualquier defecto físico que les defina como un grupo «oprimido», algo así pasa en el cine, no hay película donde no haya negros, lesbianas o transgénero.
Esta idea viene a cuento ahora porque recientemente Donald Trump ha declarado que a partir de ahora volvemos al mérito y que se han acabado las bromas, que afectan a la seguridad de todos. Parece obvio que para ser controlador, piloto o mecánico aéreo o cualquier otro oficio complejo del que depende la seguridad de otros haya que volver al sentido común es decir a la pericia demostrada de estas profesiones, ¿pero realmente se abandonó este criterio para sustituirlo por otro?
Dice Elon Musk, hoy en un tuit en la red X que:
Desde la época de Obama los demócratas no crearon —para abastecer estos puestos— un sistema de cuotas ni discriminaron en función de la raza. Trabajaron deliberadamente para hacer que los nuevos controladores aéreos fueran más tontos, con la esperanza de que la diversidad fuera el efecto secundario. Así de obsesionada está la izquierda con la DEI y así de poco les importa proteger las vidas de los pasajeros.
Pero no creas que esto del DEI afecta solamente a ciertos puestos del ejército o de la aviación civil de EEUU, es algo que todos venimos sufriendo desde hace tiempo, solo que no sabíamos que se llamaba DEI. ¿No has notado que los oficios han desaparecido y que el personal que se ocupa en ellos es cada vez menos profesional? Ya no existen buenos alicatadores, ni carpinteros, ni montadores, ni cristaleros, ni maestros albañiles, todos parecen haber sido sustituidos por una turba sin oficio alguno que han aprendido sobre la marcha de la necesidad las cuatro reglas de su oficio. Pero lo hacen mal porque no han pasado los filtros necesarios para su aprendizaje. En este sentido estas personas carecen de oficio y pueden hacer cualquier cosa aunque de forma chapucera. Esta forma de DEI no está dirigida a incluir razas o diversidad de géneros, está orientada a darles un oficio a los tontos que no sirven para ese oficio quizá porque los buenos profesionales se jubilaron sin dejar herederos. ¿No es eso lo que está haciendo la UE dando ciertos beneficios a personas que después de un cursillo dicen que son masajistas o cosas así? Existen plataformas de la UE destinadas a conseguir títulos tanto para adultos como para jóvenes. De momento los títulos académicos aun no han sido afectados.
Nadie sin su titulo. esto también es DEI.
No cabe ninguna duda de que el campo donde en España brilla más la DEI es la política. La política es la única carrera no académica donde uno puede instalarse a vivir cómodamente de por vida sin tener ningún titulo, estudios o competencias profesionales, incluso puedes llegar a ser catedrático si tienes el suficiente poder y todo esto sin hablar de los intercambios sexuales de toda la vida: sexo por recursos que es también una forma de DEI si nos atenemos a lo que oculta el acróstico.
Pero si aun no has pillado la idea que hay detrás de ese DEI, te sugiero que si no lo viste, visiones el programa que ayer nuestra RTVE transmitió en directo en horario prime, el acto de selección de nuestro representante en Eurovisión. Ignoro la razón por la que nuestra TV —que por cierto está totalmente arruinada— siga gastándose dinero en concursar es esos escenarios europeos para quedar los últimos. Eso sucederá con la elección de ayer de una tal Melody, una chica desconocida que no sabe bailar (como Chanel) ni cantar, ni presumir de una belleza fuera de serie como Jennifer Lopez o tener unas piernas o la voz de Tina Turner, a pesar de imitarlas a todas con culo incluido.
Todo parece indicar que de lo que se trata es de organizar un evento DEI, con mucho mal gusto, propaganda política (la presentadora llamó «vertedero» a la Comunidad de Madrid) mucha mala educación y la presencia de gordos, feos, chonis, charos chabacanas y personajes que parecen aparecidos de un manicomio pintado por Dalí en sus horas mas bajas. Parece que le han tomado la vez a Broncano, lo que me hace pensar en que el Benidormfest no está pensado para ganar Eurovisión sino para mostrar a los españoles lo que se merecen después de haber renunciado al sentido común del que habla Trump.
Si tomamos lo anormal como normal estamos construyendo un manicomio en el mundo, una vez que ya habíamos conseguido —los de mi generación— cerrarlos.
Nota.-
El feísmo puede llegar a ser arte si se utiliza como farsa o sátira, pero cuando se transforma en reivindicación política sucumbe a su propia plomada. La visibilización de lo cutre consigue lo que busca: aislar el mérito y devaluarlo pero para ello utiliza a los más vulnerables socialmente para presentarlos como cómicos degenerados o esperpénticos, algo que no hace sino empeorar su situación de parias, pues la gente finge que no se da cuenta, pero en el fondo desprecia la cutrez y la disfraza de tolerancia.
EL DEI estigmatiza, no libera a nadie.