Dicen que fue Arthur Koestler el pionero de lo que hoy entendemos como “teoria de las jerarquías”, una especie de dialecto de la teoría general de sistemas. Fue precisamente en ese libro de culto que conocemos como “El fantasma en la máquina” (Ghost in the machine) donde Koestler teoriza sobre las relaciones entre esos planos de definición a los que se refieren las jerarquias y es el primero en proponer ese concepto que hoy conocemos con el nombre de holón. Se trata de una idea que ha tenido mucho éxito, no sólo ha captado el interés de cineastas, músicos (como Sting) y toda clase de artistas sino que el concepto de holón ha sido asimilado con prontitud por los teóricos de la new age y ha sido llevado hasta el paroxismo:
Nótese como las muñecas rusas son un ejemplo viviente de un holón, una estructura jerárquica donde cada muñeca contiene y abarca en si misma a todas las demás que son a su vez un todo en cuanto representan la misma idea, son la misma muñeca a distinta escala.
La idea de que hay algo en la parte que contiene al todo y que a la vez es todo, es desde luego no sólo poética, sino muy inquietante. Este post está dedicado precisamente a aportar algo de luz sobre las cosas que son y las que no son holón y son simples jerarquías.
En realidad hubo otros pioneros: Neuman, Piaget y el químico Prigogyne pueden ser nombrados entre ellos, también el economista Simon o Mandelbrott. Tambien el fisico Bohm y todas las tradiciones esotéricas desde el Bhagavad Gita hasta Gurdieff. Existen precursores de la no linealidad, la complejidad y la similitud a escala en todos los ámbitos.
Una jerarquía puede definirse como una secuencia de planos de definición o de organización que además de eso pone el énfasis en el observador. Existen jerarquias en los sistemas sociales, las estructuras biológicas, y en las taxonomías, tambien en el funcionamiento cuerpo-mente y en los conflictos organismo-individuo. Dicho de otra forma: todo parece indicar que la jerarquización es un proceso espontáneo, recursivo, autosimilar y autopoyético.
Pero no siempre la cosa despliega todo su armamento.
Un ejemplo de jerarquía clásica es el ejército: generales hay pocos, soldados muchos, pero “un general no son sus soldados”,es por eso que suelen representarse en forma de pirámide. Los que ocupan el vértice de la misma poseen mas información y son los que deciden las tácticas o estrategias en el campo de batalla: los de abajo poseen poca o ninguna información, se dedican a obedecer ordenes sin necesariamente comprenderlas. Es muy importante que la información fluya hacia arriba a través de los mandos intermedios y las ordenes hacia abajo también a través de los mandos intermedios. Ya veremos un poco más tarde el valor que tienen esos mandos intermedios en cualquier organización.
En términos matemáticos una jerarquía puede definirse como una colección de piezas con relaciones asimétricas ordenadas dentro de un conjunto. Es decir, niveles superiores están por encima de los niveles más bajos, y la relación es asimétrica hacia arriba y también con las relaciones hacia abajo.
Cada nivel -a su vez- está poblado por las entidades cuyas propiedades caracterizan el nivel de que se trate por ejemplo las moléculas habitan el nivel molecular de un organismo vivo. Una entidad dada puede pertenecer a cualquier número de niveles, dependiendo de los criterios usados para enlazar los niveles por encima y por debajo. Por ejemplo, un ser humano individual puede ser un miembro del nivel i) humana, ii) de primates, iii) mamífero o Iv) de anfitrión de un parásito, dependiendo de la relación del nivel en cuestión a los de arriba y de abajo. “Mamífero” pertenece a un nivel superior al de primate y hombre. La piel parasitada por un parasito cualquiera pertenece a un nivel inferior (la piel) que puede pertenecer a varios niveles jerárquicos, por ejemplo el mismo parasito puede infectar a entidades de otro nivel , simios o perros.
Una jerarquía supone la idea de que las partes no están libres sino subsumidas en una entidad que va mas allá de ellas mismas, algo que las abarca y que opera por emergencia de las anteriores. De partes separadas no puede emerger nada, así hay varios criterios para que otros niveles residen encima de los niveles inferiores. Los niveles superiores están por encima de los niveles más bajos en virtud de: 1) son contextuales del nivel subordinado, 2) Ofrecen limitación al subordinado, 3) Se comportan con mayor lentitud que el subordinado 4) Está poblado por entidades con una mayor integridad y mayor resistencia de la unión de entidades paralelas (no subordinadas) y 5), que contiene (abarca) y emerge de ellos (de niveles más bajos) .
Así mientras los niveles superiores limitan a los niveles inferiores, estos representan el limite de lo posible. Los seres humanos no podemos ser invisibles porque hay un limite físico en los niveles inferiores (no existe un gen de la invisibilidad) pero podemos imaginar o creer que somos invisibles en otro nivel, usualmente mental.
Del mismo modo tenemos cinco dedos en cada mano o pie, fruto de nuestra herencia mamífera, pero no hay ninguna razón para que no podamos tener otro numero de dedos, el limite de lo posible que determina nuestra herencia mamífera puede ser transgredido en otro nivel superior. Restricción y posibilidad son dos entidades que se encuentran en permanente conflicto. El azar y no sólo la genética puede imponernos seis dedos en lugar de cinco pues las limitaciones vienen de arriba, mientras que los límites en cuanto a lo que es posible vienen desde abajo.
Del mismo modo es imposible saber cuando la biología se transforma en química y cuando la química deviene en física.
Un sistema elaboradamente jerárquico se comporta de una manera más simple. La razón es que, con la aparición de niveles intermedios, las entidades de nivel más bajo están condenadas a situarse más lejos del equilibrio. Como resultado, las entidades de nivel más bajo pierden grados de libertad y se organizan en contra de la restricción de nivel superior para dar un comportamiento constante. Una estructura jerárquica profunda indica elaborada organización, y las jerarquías profundas a menudo se consideran como sistemas complejos en virtud de la profundidad jerárquica.
Otra cuestión interesante es diferenciar entre un sistema complicado y otro complejo:una estructura jerárquica con un gran número de entidades de nivel más bajo, pero con una organización simple, ofrece una jerarquía plana baja que es complicada pero no compleja. El comportamiento de los sistemas estructuralmente complicados es conductualmente elaborada y complicada, mientras que el comportamiento de los profundos sistemas jerárquicamente complejos es simple.
Ahora que ya sabemos todas estas cuestiones vamos a ver más de cerca que son las estructuras anidadas (holones) y las que no son son holones.
Pero será en el próximo post