Personalmente me gustan los modelos tripartitos de la mente, desde Platón hasta Freud y llegando ahora a Vinod Venon autor de esta teoria de la triple red. En síntesis esta teoría viene a decir lo siguiente:
Existen al menos tres redes neuronales bien distintas en el cerebro que pueden estudiarse por separado si bien las relaciones entre ellas forman parte —al menos de forma incompleta— de la psicopatología, segun Venon, la esquizofrenia, la ansiedad, el trastorno por estrés postraumatico o la depresión pueden explicarse a través de las relaciones aberrantes entre ellas. Asi:
Deanna Barch, que estudia neurobiología de las enfermedades mentales en la Universidad de Washington en St. Louis, está intrigada por la teoría de la triple red. Investigar cómo las redes están conectadas de manera diferente en personas con trastornos de salud mental puede ayudar a los investigadores a encontrar mecanismos subyacentes y desarrollar tratamientos, explica. Sin embargo, no cree que las interacciones de redes por sí solas expliquen completamente las enfermedades mentales. «Creo que entender las diferencias de conectividad es un punto de partida», afirma Barch. «No es un punto final».(Extraido de este post)
La primera de estas redes, es la ejecutiva, eso que llamamos yo y que se activa cuando estamos prestando atención a una tarea concreta, como yo ahora mientras escribo este post. La segunda de estas redes es la llamada red neuronal por defecto de la que ya hablé aquí. es la red que se activa cuando no estamos haciendo nada, cuando pensamos en modo de piloto automático, la vida interior de la que hablan los filósofos y la tercera de ellas es la red llamada prominente también conocida como la red de saliencia.
La red de saliencia.-
La saliencia (salience) es un neologismo creado por David Newlin en relación con las drogodependencias y que como su nombre indica se refiere a lo que sale de esa red relacionada con la dopamina, sus aspectos apetitivos y los núcleos basales del cerebro, el núcleo caudado sobre todo. «Lo que sale» tiene que ver con las preferencias, aquello a lo que damos importancia, el dato relevante subjetivo, lo que nos importa o nos gusta y que elegimos activamente cuando tenemos la oportunidad. En suma: la motivación. Para un cocainómano la cocaína es la saliencia (el estimulo preferido), para el ama de casa perfeccionista, la limpieza es la saliencia, para el corredor de fondo la carrera, para el futbolista el gol.
Motivación sin incentivos externos.-
Ahora bien, la saliencia no está siempre relacionada con el placer o con el disfrute, puesto que el par recompensa-placer es la señal de que nuestra via dopaminérgica está a medio hacer, y los aspectos apetitivos o subjetivamente importantes a veces se relacionan con lo placentero y a veces no. Lo importante es comprender que la red de saliencia opera a veces sin incentivos, guiada solo por la estimulación intrínseca del cerebro. Nuestros hobbyes por ejemplo no tienen ningún premio externo, no dependen de los resultados ni de recompensas ajenas. Oímos musica por el placer de oirla, incluso componemos musica o escribimos novelas que sabemos que no se venderán y que tendrán poca trascendencia publica y lo hacemos porque disfrutamos haciéndolo independientemente de la vía ejecutiva que casi siempre nos viene forzada desde afuera.
Yo escribo este post por el placer de escribirlo aunque implique a mi red ejecutiva para escribirlo bien y precise esfuerzo y atención y no porque vaya a recibir un premio de mis pocos lectores (esos que dejan algún comentario) y me hacen feed back, recordándome que alguien los lee o a alguien les cambia su forma de pensar o les ayuda de alguna manera.
Pero la red de saliencia tiene una versión oscura. No siempre atendemos a esas saliencias por disfrute sino muchas veces por obligación. Algunas personas pueden no disfrutar en absoluto haciendo lo que hacen, aunque eso que hacen les venga determinado por su nucleo caudado. es lo que les sucede a las conductas compulsivas que son dictadas por la saliencia de orden, limpieza u control. de manera que podemos hablar tanto de placer-recompensa como de control -recompensa. Ambos proporcionan algún tipo de recompensa pero no siempre de placer. Por eso siempre he defendido que una cosa es el placer y otra —como dicen los psicoanalistas— el goce.
Goce es el nombre que los psicoanalistas dan a las saliencias obligatorioas, que no son otra cosa sino saliencias aberrantes de las que habla precisamente Vinod Venon en su articulo (citado más arriba).
Lo que nos permite una especulación: hay personas orientadas hacia el placer y personas orientadas hacia el deber. Es muy probable que eso que llamamos cerebro moral sea un subsistema de la red de saliencia. Y que Freud tuviera razón en sus especulaciones sobre el Superyó. Un sistema que emergería del Yo en contacto con las primeras prohibiciones u obligaciones.
Bibliografía.-
Newlin DB. The self-perceived survival ability and reproductive fitness (SPFit) theory of susbstance use disorders. Addiction 2002 Apr; 97 (4):427-445